Uno de los retos que deberá enfrentar el comercio mexicano de aquí a los próximos meses será la bancarización, es decir, convertir a clientes de efectivo en compradores digitales.
Lo último no obedece exclusivamente a que las personas se dediquen a comprar a través de internet, sino a transformar la manera en cómo se pagan los productos y dar un paso vanguardista con el pago a través de billeteras electrónicas.
Y pese a que el e-commerce ganó exclusividad como método de compras en 2020, las transacciones a través de tiendas físicas no dejan de ser una alternativa para los usuarios, al igual que el uso del dinero en efectivo.
Así lo miran las tiendas departamentales como Liverpool, Palacio de Hierro o Sears, que han visto durante este año a cifras “irreales” tras la reapertura. Por ejemplo, en abril pasado donde sus ventas crecieron hasta 254%.
“Las cifras hasta parecen irreales, porque el total de departamentales para marzo es de 44.3%, sin embargo, para abril es de 254.6% y en mayo 141.4%. ¿Qué fue lo que pasó? Cuando pudieron volver a abrir las tiendas y recibir a sus clientes, después de muchos meses todo se vuelve esencial: ropa, zapatos, electrónica, etcétera, entonces, pudieron vender”, aseguró Vicente Yáñez, presidente de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (Antad) a Forbes.
El desafíos de los pagos digitales
Con la reapertura, las tiendas departamentales pudieron mirar los perfiles del comprador en tiempo pasado y presente, pues observaron a quienes aún se manejan sólo con efectivo y a quienes le sacan partido a la tecnología, lo que les permitió determinar desafíos.
“Quizá el gran reto (…) es cómo bancarizas, cómo creces esa parte. Creo que el uso de efectivo en nuestro país todavía es altísimo, para las ventas online el efectivo no es el canal, el instrumento o la herramienta adecuada, entonces, yo veo una enorme oportunidad para bancarizar al país, para tener instrumentos más fáciles”, aseguró Yáñez.
De hecho, en la industria están convencidos que las billeteras o monederos digitales serán muy importantes a futuro, ya que el celular se convirtió en un artículo de primera necesidad para todos.
Creo que aquí está la oportunidad, el reto y habrá que adaptarse en nuestro sector. Las inversiones en cadena de distribución se están dando, pero hay que ver de qué forma alinearnos y sincronizarnos con los nuevos retos que representa esto”, concluyó el dirigente de la Antad.
México se digitaliza
De acuerdo al informe “Mastercard New Payments Index”, realizado en 18 mercados de todo el mundo, hay conciencia por parte de la ciudadanía respecto al cambio que se debe producir en cuanto a nuevas formas de pago a raíz de la situación que ha debido enfrentar el mundo con el avance de la pandemia.
Por ejemplo, el 93% de las personas se plantean usar al menos un método de pago emergente como las criptomonedas, las tecnologías biométricas, los pagos sin contacto o el código QR.
Sin ir más lejos, Dapp, la plataforma que se enfoca en ser la conexión entre billeteras electrónicas y agregados de pago en México, dio a conocer que recaudó 12.400.000 dólares, montos que serán invertidos para fortalecer su presencia en el país.
En rigor, se trata de una empresa que posibilita la operación de wallets, comercios y locales de pago, a través de tecnología desarrollada por especialistas y que disminuye el riesgo de usar una tarjeta o caer en posibles fraudes.
“Nuestra meta para los siguientes 12 meses es clara: impactar de manera positiva a 1 de cada 2 mexicanos económicamente activos, es decir, tener a 25 millones de usuarios directos. Además, daremos un paso hacia la globalización económica, al llevar la tecnología Dapp a otros países de la región”, señaló Antonio Peláez, CEO y cofundador de Dapp México a La Jornada.
Dicha empresa logró en menos de un año llegar a 20 mil comercios y su meta en los próximos doce meses es lograr 240 mil nuevos negocios, lo que permitirá la reducción en la circulación del efectivo.
Y para ganar presencia, ya opera con importantes instituciones financieras, como lo son Citibanamex, Banregio y Banco Azteca; billeteras como Bitso, ClaroPay, Kueski, Azteca, además de comercios y otros servicios.
El e-commerce lo potencia
Las compras en línea fueron el salvavidas del canal autoservicio a la hora de sobrellevar los meses más complejos de la pandemia durante este año y medio.
Bien lo saben aquellas tiendas que implementaron estrategias de omnicanalidad, lo que les permitió escalar a un nuevo nivel de experiencia junto a los clientes.
Así lo estima Leandro Laporta, de la empresa de servicios digitales Orange Business Services, quien señaló que la apertura de las tiendas físicas puede mejorar la experiencia de compra con quioscos interactivos, mesas táctiles y pantallas digitales que impulsan la participación de los consumidores.
“Muchos minoristas siguen gestionando sus canales de venta en línea y físicos de forma separada. Es necesario trabajar con herramientas de integración para mapear a los clientes y unificar todos sus canales de ventas, gestión de pedidos, procesamiento de pagos, programas de fidelización, opciones de entrega y más, tanto dentro como fuera de la tienda. Esto les permitirá ofrecer las verdaderas experiencias de omnicanalidad que sus clientes esperan”, concluyó.
