La gestión de stock se ha convertido en un tema relevante para lograr un desempeño exitoso en la competitiva industria del retail, ya que la principal preocupación de la mayoría de los proveedores del canal moderno es que sus productos estén en góndola, siempre a disposición del consumidor final.
Por lo mismo, una buena gestión de las existencias implica generar un balance entre tener la suficiente mercadería para responder a la demanda de los shoppers y lograr que se venda todo, para así aumentar los ingresos y los márgenes, de ahí radica su importancia para el crecimiento de tu empresa.
Un análisis realizado por Advanced Supply Chain Group en el Reino Unido reveló que antes de la pandemia de COVID-19, los problemas de gestión de stock le costaban más de 2 mil millones de dólares (1.600 millones de libras esterlinas) a los minoristas.
Uno de los problemas más mencionados es la escasa disponibilidad de productos, que provocó la pérdida de ventas y la disolución de los márgenes. Otra de las dificultades más recurrentes fue el sobrestock, que llevó a que realizaran grandes descuentos en los productos, además de pérdidas por stock antiguo y obsoleto.
Por este motivo, es importante lograr una óptima gestión del stock, para planificar futuras contingencias y tomar mejores decisiones en base a la información. En ese sentido, los datos pueden ayudar a establecer el momento óptimo en que se puede realizar una promoción o liquidación, con el propósito de mejorar la rentabilidad y disminuir el impacto de las pérdidas.
¿Cómo afecta a la venta futura?
Cuando una empresa descuida el control de stock, ya sea a través del uso de sistemas inadecuados o malas decisiones comerciales, originadas por datos desactualizados y sin respaldo, se verá enfrentado a góndolas vacías que intentará reponer de manera desesperada para evitar que la competencia tome mayor protagonismo.
Un estante de supermercado vacío, en la gran mayoría de los casos, provoca un efecto dominó que agrava los problemas de gestión de stock dentro de una compañía. Y a menos que se tomen medidas inmediatas, como la implementación de una herramienta BI que permita detectar estos problemas y solucionarlos a tiempo, las pérdidas que puede experimentar una compañía pueden ser de gravedad, sin mencionar los conflictos que pueden llegar a surgir con las grandes cadenas al no cumplir con las condiciones acordadas.
Cuando un proveedor de retail no tiene lo que un shopper quiere en el momento indicado, de forma automática pierde una venta. Y la suma de ventas perdidas se traduce en ingresos perdidos, lo que a largo plazo disminuye la rentabilidad del negocio. Perder dinero por no tener el suficiente stock en el punto de venta es un pecado capital en el retail.
Si una empresa no tiene la capacidad de acceder a la información sobre el desempeño de sus productos en tiempo real, tendrá problemas a la hora de analizar el rendimiento histórico por cada SKU, predecir la demanda futura o lograr la necesaria reposición de productos para evitar el quiebre de stock en un futuro.
Evita a toda costa estas consecuencias
Además de la pérdida de una venta, que es el efecto más inmediato de una inadecuada gestión del stock, existen otras consecuencias negativas que pueden causar graves problemas para el desarrollo del negocio:
- Menor margen de beneficios: cuando un proveedor tiene que luchar por abastecer el punto de venta, incurre en una serie de costos relacionados con la reposición de emergencia que pueden pulverizar los márgenes de beneficio. En el mejor de los casos, se puede conseguir un “punto de equilibrio”, pero para aquellas compañías que operan con márgenes pequeños de ganancia, este tipo de contingencias puede significarles el tener que vender con pérdidas.
- Shoppers se van a la competencia: cuando el desabastecimiento se convierte en una constante, es muy probable que el consumidor final se decante por un producto de la competencia. Además, considerando el competitivo contexto actual en el que se mueve el canal moderno, donde las personas privilegian el precio o la presencia en las góndolas por sobre la lealtad a las marcas, una gestión de stock deficiente puede significar la pérdida de valiosos consumidores.
- Pérdida de valor en la imagen: se dice que se necesitan años o incluso décadas para construir una buena reputación, pero bastan solo unos momentos para destruirla. De la misma manera, cuando una marca no puede cumplir con las demandas de un consumidor debido a una deficiente gestión de su stock, su imagen frente al cliente final pierde valor, siendo vista como poco confiable. Y si a eso se le suma lo mencionado en el punto anterior, ambas circunstancias pueden transformarse en la lápida que puede sepultar su negocio.
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Si una inadecuada gestión de stock es el problema que tienes en la actualidad, te contamos que hay buenas noticias: es posible solucionar este problema e impulsar el crecimiento de tu empresa.
Existen herramientas BI de gestión de stock que pueden trabajar de manera productiva y que te pueden ayudar a resolver estas dificultades, a través del uso de datos y su análisis al detalle.
Nuestra plataforma te ayuda a anticipar el quiebre de stock a través del uso de alertas que muestran de manera instantánea cuando los niveles de existencias están llegando a un punto crítico y necesitas una reposición de manera urgente. Además, InStoreView permite la sincronización de todos los miembros claves del equipo, y así puedan conocer en tiempo real la situación en locales o tiendas, fomentando la sinergia de los datos de manera ágil y remota, lo que ayuda a impulsar la previsión y la automatización de las funciones clave en la cadena de suministro.
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